Llegó e inmediatamente lo miraron de reojo, por su edad y por quedar sumergido en el descenso con Argentinos. Solo le bastaron un par de partidos para guardarse a todos en el bolsillo y demostrar su categoría. Encima, su idilio con la gente se transformó en locura con el gol al "Xeneize" en la Semifinal, a tal manera de alcanzar el éxtasis con su anotación en el Atanasio Girardot.
Convertido en un referente del vestuario, le dio la bienvenida públicamente a Gonzalo Martínez, flamante incorporación. "Es un jugador de un uno contra uno muy bueno, con mucha velocidad y esperemos que se adapte rápido y nos brinde lo que le dio a Huracán. La competencia es linda y sana a la vez. Todos vamos a dar el máximo y Marcelo decidirá quién jugará", expresó.
Gracias a lo conseguido, "Piscu" goza cotidianamente del amor de los fanáticos, que lo esperan para sacarse fotos y pedirle autógrafos. Y más de uno tiene el ringtone con la frase que inmortalizó Rodolfo De Paoli. Sin embargo, el enganche no se siente idolatrado. "No soy ídolo. Soy de pensar que todos nos ganamos ese cariño por lo que conseguimos. El equipo tuvo mucha actitud y por ahí la gente se sintió identificada. Yo recibo el cariño y estoy contento por eso, pero soy consciente de que hay muchas cosas por jugar y eso es importante. Este grupo va por más, tiene un carácter muy fuerte y no serelaja", retrucó el ex Bicho. Y prosiguió a dar un ejemplo sobre ocupar el trono en la historia del club. "Cavenaghi es ídolo.Es importante para el grupo, lo demuestra en los partidos. Está muy bien y esperemos que siga así", clamó.
Para cerrar, imaginó el encuentro que le disputarán al máximo rival. Vamos con la idea de mejorar. "Mejor si jugamos bien y ganamos, es lo que queremos todos, pero por ahí estos partidos hay que ganarlos para agarrar confianza, pero lo importante también es hacerlo bien", finalizó el dueño de la zurda formidable.
Lucas Ajuria
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