Otra vez el arquero de River mostró el nivel que viene teniendo en los últimos partidos. Tapó todo lo que le tiraron. Y, además, transmite seguridad en cada una de sus intervenciones.
Marcelo Barovero tranquilizó al equipo cada vez que intervino. Ya desde el arranque le tapó un tiro difícil a Piatti, que estuvo muy cerca de filtrarse al palo izquierdo de River.
En el resto del primer tiempo tuvo buenas intervenciones como una atajada a Verón y otra, nuevamente, a Piatti desde afuera del área, que sacó por encima del travesaño sin complicarse.
A los 41 minutos le tapó un mano a mano a Cauteruccio con mucha inteligencia. En esta ocasión tuvo que atajar con los pies porque de llegar al piso con los brazos y el cuerpo era muy probable que le cometiera penal al delantero azulgrana.
Ya en la segunda etapa tuvo mucho menos trabajo: casi se le mete un buen tiro libre de Navarro que dio en el travesaño pero, exceptuando esta jugada, controló siempre.
A los 83 minutos evitó la caída de su valla al atajarle un excelente mano a mano a Villalba.
En todas las chances de gol mostró la velocidad de piernas y esa visión para adelantarse a la jugada.
Barovero continúa teniendo grandes actuaciones en River y demostrando que el arco del Más Grande no le queda tan grande.
Marcelo Andrés Guzmán
@marceloaimar
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