River volvió a los planos internacionales y desde principio de año ya se visualizaba un futuro muy esperanzador. Como ocurre con los equipos campeones, todos quieren jugar allí. Y al aspirar a grandes cosas se aspira a jugadores extranjeros, pero siempre complica el cupo, hasta hoy.
Hace seis meses Carlos Sánchez (Uruguay) retornaba del préstamo que lo llevó a aterrizar en tierras mexicanas, más precisamente en el Puebla. Uno de los motivos de su partida fue el cupo que ocupaba por ser nativo de otro país, claro que también la decisión estuvo acompañada de su irregular nivel. En su lugar inmigró Carlos Carbonero, quien supo ganarse los aplausos en el Torneo Final 2014.
Resultaba difícil imaginar un reemplazante que logre hacerlo olvidar una vez que sea efectivo su traspaso al fútbol europeo. Y ahí es cuando vuelve a aparecer el “Pato” Sánchez, quién llegó cabizbajo y terminó siendo un jugador fundamental. En las gradas se volvió a escuchar el histórico “Uruguayo! Uruguayo!” y Carlos encontró su lugar en el mundo. Y hoy más que nunca por haber obtenido la ciudadanía Argentina, más allá de haber disputado partidos con su selección .
Por lo tanto, Sánchez ocupa un lugar fundamental en la cancha pero no en la parte del papeleo. Quienes si lo ocupan son Balanta, Mora y Teo, de los cuales hay dos posibles cupos a liberarse en los mercados de pases venideros. A partir de ahora se puede intentar traer un refuerzo que aporte calidad made in otro país. Con algunos nombres en carpeta, ya no será un dolor de cabeza el famoso “cupo”, lo que seguramente ayudará al momento
Mauro J. Acevedo
@mauacvdo
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