River debió sufrir para derrotar a Estudiantes 3-2 en el Monumental y avanzó a semifinales de la Copa Sudamericana donde espera a Boca. Teo abrió el marcador, y cuando el "Pincha" se puso 2-1, apareció Mora y Ramiro Funes Mori. Una vez más el equipo de Gallardo mostró el temple para llevarse un partido que se presentaba muy complicado y ahora tiene revancha del Superclásico pasado por agua.
MARCELO BAROVERO: (8) Grandes tapadas a Aguirregaray una con los pies y otra con las manos cuando mediaba el primer tiempo. Y de arranque le tapó un cabezazo a menos de un metro de distancia a Auzqui. Gigante como el "Trapito" de la primera hora, hoy realmente se lució.
GABRIEL MERCADO: (4) Perdió a Vera en el gol, descuidó la espalda en el centro de Auzqui. Subió poco por su banda y, junto con Solari, no pesó en ataque. Llegó tarde al cruce de Correa antes que Barovero le cometa penal.
JONATAN MAIDANA: (4) Inseguro. Perdió demasiado a Carrillo y, como toda la defensa, no pudo aguantar los embates de los delanteros platenses. Estudiantes creó muchas situaciones cuando dudaron en el fondo. En la segunda parte se acomodó, como todo River, y supieron cerrar el partido.
RAMIRO FUNES MORI: (7) Floja primera parte donde perdió muchas veces con Vera. Irreconocible en la marca. Creció mucho en el segundo tiempo, donde River se puso acomodar en la defensa, y coronó un cierre de noche con el tercero del Millonario. Terminó sacando todo lo que tiró Estudiantes en el segundo tiempo.
LEONEL VANGIONI: (5) Dejó que Auzqui tirara el centro en el segundo palo. Subió y llegó al final, más en el primer tiempo que en el segundo, y se fue desvaneciendo con el correr de los minutos. No le llegaron tanto por su zona aunque por ahí llegó el primer gol del "Pincha".
AUGUSTO SOLARI: (3) El más flojo de River. Le costó suplantar a Sánchez. Nunca le encontró la vuelta al partido ni en defensa ni en ataque. Habilitó a Piscu en una llegada al fondo que el ex Argentinos elevó por arriba del horizontal. Y con el 3-2 se soltó un poco más pero no supieron liquidar el partido.
LEONARDO PONZIO: (4) Otro que sufrió el despliegue del equipo de Pellegrino. Le costó hacerse dueño de la mitad y River lo sintió. Impreciso con la pelota en los pies. Se acomodó en el segundo tiempo y fue para adelante cuando había que revertir el 1-2.
ARIEL ROJAS: (7) Un león en el medio. Corrió todo, y la habilitación del primer gol es por la perseverancia de no dejar una pelota sin pelear. Cuando el resultado invitaba a los penales él fue uno de los que sacó el temple que caracteriza al equipo de Gallardo.
LEONARDO PISCULICHI: (6) Lo tuvo frente a Hilario y la tiró por arriba. Pero tiene un guante en los pies. Centros impecables para los goles de Mora y Ramiro. Le costó hacerse un hueco por el despliegue del conjunto platense.
RODRIGO MORA: (8) Coraje puro. Peleó, marcó, corrió, y hasta alejó los fantasmas de cabeza cuando las palpitaciones llegaban al limite. Hizo el segundo, pudo convertir de vuelta de cabeza, pese a su metro 68, y salió mitad lesionado y extenuado por el despliegue.
TEÓFILO GUTIÉRREZ: (7) La calidad de siempre al servicio del equipo. Pinchó la pelota y definió en un tiempo para decretar a los 40 segundo del partido el 1-0. Tuvo el segundo después de un regalo de Desábato y lo tiró ancho del palo izquierdo de Navarro. Cuando River necesita un respiro, deposita la bola en sus pies y el equipo descansa, y muchas veces desde él nace la elaboración en tres cuarto.
INGRESARON:
LUCAS BOYÉ: (6) Entró para ver si podía liquidar el encuentro. Tuvo alguna pero no concretó. Le dio aire fresco al ataque.
TOMÁS MARTINEZ: (5) Con él Gallardo intentó tener un poco mas la pelota. Tuvo algún disparo aislado pero no llegó a transformarse en el conductor.
GIOVANNI SIMEONE: (-) Ingresó a falta de minutos para finalizar el partido. También aportó aire al ataque.
MARCELO GALLARDO: (5) No le encontró la vuelta a un partido que arrancó de forma ideal. El gol desde el arranque no sirvió para aprovechar la ventaja que eso generaba y dejó crecer al conjunto platense. El medio perdió y muchas veces la defensa quedó doblegada. Pero el carácter que hoy tiene River es de su propia elaboración y por esa virtud no desesperó y fue a buscar. Lo encontró por otra de sus virtudes, la pelota parada. Hacía mucho tiempo que el "Millonario" no tenía ese punto fuerte.
Marcelo Andrés Guzmán
@marceloaimar
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