
La Inspección General de Justicia ordenó el lunes a la dirigencia de River a "reformular" el balance cerrado de mitad de año 2012, alegando que "el ejercicio económico aprobado por Passarella en agosto del 2012 tiene como parte del activo una venta ficticia". Mirá las imágenes exclusivas que logró obtener River Instante.
La IGJ ordenó rectificar el balance que incluyó a Rogelio Funes Mori como parte del activo por una supuesta futura venta que finalmente no se realizó. Gracias a esa "venta" del delantero, el balance había arrojado un superávit de 17 millones de pesos.
Ante esa situación, Daniel Passarella había intentado justificarse: "Funes Mori aparece vendido en el balance porque tuvimos una oferta por él de 8 millones de dólares y lo pusimos pero no lo quiero vender. Se pone como algo que genera dinero para el club. Podríamos haber revaluado más jugadores pero fui prudente y sólo lo hice con uno. Son capitales del club, ¡¿cómo no los vamos a poner como activos?!. Teníamos la sensación de que no estábamos haciendo ninguna trampa", había dicho por entonces presidente de la institución.
Esa declaración de DAP vino en "respuesta" al escándalo y polémica que se había generado en torno al ocultamiento de la realidad económica que atravesaba el club.
Eran tales las dificultades que había en River que se debió convertir una supuesta oferta por Rogelio Funes Mori en una venta confirmada para engrosar el activo y lograr el superávit.
Debido a estas irregularidades, los por entonces vocales por la oposición (entre quienes estaban el actual vicepresidente Matías Patanian, el tesorero Andrés Ballota y el Presidente de la Asamblea de Socios Darío Santilli), presentaron la impugnación de ese balance ante la Inspección General de Justicia, la cual, mediante la resolución número 1537, solicitó la "reformulación del ejercicio económico cerrado en agosto de 2012" ya que, de acuerdo al criterio de la IGJ "esta valuación del jugador Funes Mori vulnera los criterios seguidos para la confección de los estados contables de acuerdo con normas profesionales aprobadas" .
Además, "debe reformularse también" el ejercicio cerrado en 2013, donde se advierten las mismas irregularidades a partir de la activación de Manuel Lanzini en similares condiciones.
Por último, la IGJ intima "en el plazo perentorio de diez días de notificado" al club a que "convoque a una nueva asamblea a celebrarse dentro de los 30 días siguientes, a fin de rectificar el balance confeccionado por la gestión de Daniel Passarella, correspondiente al ejercicio 2012".
@AxelPolicani
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