River fue el equipo que menos conductas antideportivas tuvo a lo largo del torneo local. A continuación, las estadísticas que lo demuestran.
El temperamento para ganar un partido, un clásico o la final de un torneo muchas veces traiciona a los jugadores, que recurren a infracciones que ponen en riesgo la integridad física del rival e incluso la propia. El Más Grande, pese a que no peleó el certamen hasta el final, arrancó el mismo de una manera interesante y con chances de trepar a la cima con compromisos pendientes. Luego, no pudo cumplir su cometido pero aprobó en una materia.
Se trata del Fair Play que tanto se pregona en el fútbol. Así como tirarla afuera cuando un colega está dolorido o devolver gentilezas luego de un pique, la asignatura más difícil es la de no cometer faltas ni recibir cartulinas por parte del árbitro. Sin embargo, el campeón de América dio cátedra en ese sentido y encabeza el ranking de juego limpio de la temporada.
Con 52 amonestaciones y 3 expulsiones, es el conjunto que menos sufrió las sanciones de los jueces. En la otra punta de la tabla, Gimnasia de La Plata fue el elenco que más le escapó al Fair Play, con 107 amarillas y 9 rojas. En medio de un ambiente en el que predomina la violencia, es bueno que los protagonistas den el ejemplo y no pase a mayores. Pero como siempre, el honor está en juego. Esto es fútbol.
Lucas Ajuria
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