"Ese Burrito no es un Burrito cualquiera, es jujeño y tiene nombre: él se llama Ariel Ortega". Uno de los últimos grandes ídolos del Más Grande. Alguien que crecio en el club, defendió con la camiseta con alma y vida pero sobre todo con fútbol. Campeón de todos, idas y retornos. Levantó la Copa Libertadores de 1996.
Corría el Apertura 1991, River ya era campeón. Visitaba por la fecha 18 a Platense en cancha de Independiente. El Millonario vencía 1 a 0 al Calamar con un gol de la Bruja Berti para celebrar un nuevo titulo conseguido.
A los 40' del segundo tiempo, Passarella decidió hacer debutar a un pibe que prometía mucho. Ingreso Ortega por Claudio Spontón. Y desde esa tarde, empezó una historia de amor entre el Burrito, River y los hinchas.
Ortega tuvo 4 pasos por la Banda. En total, jugó 272 partidos conviritiendo 65 goles y dando 82 asistencias. Cosechó 6 títulos nacionales ( 4 aperturas y 2 clausuras) y uno internacional: La Copa Libertadores.
Mas allá de las frías estadísticas, el Burrito Ortega le regaló a River gambetas y jugadas que muestran lo que es el Millonario. Ganar, gustar y golear. Uno de los últimos representantes futbolisticos del paladar negro. ¡Te extrañamos Ariel!
Francisco Fanego
@FrancisFFanego7
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