Marcelo Barovero se ha ganado el corazón del hincha de River por sus grandes actuaciones y, además, porque en los partidos decisivos se hizo realmente gigante: sólo recibió un gol en finales internacionales.
Hace una semana se dio el gusto de salir campeón de América y esta mañana, como único capitán, exhibió al mundo la nueva conquista. El Millonario se quedó con la Suruga Bank en tierras asiáticas y el arquero completó una muy buena actuación, a pesar de haber protagonizado un blooper en su primera intervención.
Trapito se las ingenió para hacerse gigante en los partidos finales que significaban la obtención de un título y vio entrar la pelota en su arco una sola vez. Fue en la final de la Copa Sudamericana, en el encuentro de ida en Medellín, cuando River empató 1-1 contra Nacional. A partir de ese momento, Barovero clausuró los tres palos.
La vuelta de ese partido fue 2-0 en el Monumental y la Banda se quedó con el trofeo. A comienzos de este año, los dos encuentros contra San Lorenzo por la Recopa terminaron 1-0 a favor del equipo de Gallardo. En la final de la Libertadores, fue 0-0 en Monterrey y 3-0 en Núñez. Mismo resultado obtuvo River en Japón y se quedó con la Suruga Bank.
Tremenda racha de Barovero, un arquero sobrio y simple que aparece en los momentos indicados. Además, Trapito mantuvo el arco invicto en 15 cotejos internacionales (6 por Sudamericana, 2 por la Recopa y 7 por Libertadores) sobre un total de 26 partidos disputados. No por nada es el mejor arquero de América.
Macarena Álvarez Kelly
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