Los mexicanos se impusieron 1 a 0 en su excursión a Oruro, asegurándose la cima de la tabla por los próximos dos partidos. Nahuel Guzmán, clave, tapó un penal a poco del final.
Tal como lo adelantó Gallardo, River debe enfocarse en el trascendental partido de esta noche frente a Juan Aurich, aunque era inevitable observar de reojo el duelo entre los otros integrantes del grupo.
Tigres, que lideraba con cuatro unidades, se sometía a los asfixiantes 4.000 metros de altura del altiplano. El dueño de casa, con los tres porotos obtenidos contra el Millonario, pretendía hacer valer la localía y la altitud, factores decisivos para la aleatoria trayectoria del balón. Sin embargo, una buena jugada de Damián Álvarez a los 39 minutos, prosiguió con una asistencia a Amaury Escoto, que no perdonó. El resto del partido, ‘La Fiera’ lo disputó igual que el equipo del Muñeco, pero más agrupado en defensa y con paciencia para pasar la mitad de cancha.
San José, con todas sus limitaciones, se dedicó a enviar centros al corazón del área, rechazados por los centrales o descolgados por el ‘Patón’, que tendría su momento de gloria. El mismo fue cuando el uruguayo Andrés Cunha pitó penal para los bolivianos, a catorce minutos del cierre. Carlos Lampe, arquero del Santo, se hizo cargo de ejecutar la pena máxima, pero Guzmán le arruinó el festejo. Se quedó con la pelota más difícil cuando sus compañeros se resignaban a firmar el empate.
Aún sin titulares de peso como Guido Pizarro y Joffre Guerrón, los aztecas se las ingeniaron para dar el batacazo, trepándose con suma comodidad al primer puesto. De esta manera, Tigres suma siete, seguido por San José y Juan Aurich, ambos con tres. River, último con uno, hoy juega contra los peruanos y puede convertirse en el único escolta, a falta de tres fechas para la culminación de la fase de grupos.
Lucas Ajuria
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