Parece no tener rival, hace lo que quiere, juega cuando quiere. Se toma respiros, piensa, le cede el balón al que lo enfrenta pero cuando éste intenta atacarlo responde de manera “mortal”. Hoy se dio el lujo de entrar “dormidito” en el segundo tiempo hasta que se enojó y de a poco empezó a bajarle la persiana al partido. Así es River, no se fastidia aunque le hagan tiempo en cada saque de meta y aunque simulen golpes. Ataca, te presiona, te cachetea una y otra vez, te da el protagonismo suficiente y, si no lo sabes aprovechar, todo lo hecho será en vano. Un personaje llamado Juan Carlos Olave actuó en el Estadio Monumental pero lo hizo de manera paupérrima: se olvidó que enfrente tenía al puntero e invicto del certamen.
¡Feliz día de las maTRES! Muchas madres riverplatenses se auto-regalaron presenciar una fiesta, y muchos hijos le pidieron disculpas a mamá y fueron testigos de la categórica victoria del equipo que dirige Marcelo Gallardo ante el tibio Belgrano de Córdoba. Debería quedarles claro a los rivales a enfrentar que a éste River no se le va a ganar haciendo tiempo, no es una táctica efectiva puesto que en los primeros minutos del complemento el “Millonario” estuvo dormido y cuando despertó aumentó la diferencia en el marcador y la transformó en goleada: Teo on fire.
El arranque del partido tuvo a los de Núñez haciendo uso de esa arma electrizante llamada presión: desde Marcelo Barovero hasta Teófilo Gutiérrez concentrados en adueñarse del partido en todos los sectores del campo de juego. Carlos Sánchez y Augusto Solari intentaban por derecha, Ariel Rojas y Leonel Vangioni acechaban por izquierda y en el medio contaban con un sostén impasable llamado Guido Rodríguez: aplausos para este mediocampista que ya promete ser una figura destacada. Y River iba, aunque no tenía a Leonardo Pisculichi en su mejor versión, pero iba y quería romper el cero. El actor dramático Olave pretendía ser toro en rodeo ajeno pero terminó siendo un ternerito asustado que no hizo otra cosa que ir a buscarla adentro por partida triple.
Y llegó el primero. El ser perseverante tuvo su merecido premio. El lateral de Augusto Solari llegó hasta el área para “Piscu” que la dejó para Rodrigo Mora. El uruguayo la aguantó y la punteó para Rojas que con gran visión observó la llegada solitaria de Vangioni. A “Piri” solo le bastó empujarla y salir a festejar de cara a la Platea Belgrano para que el “Monumental” estallara a los 33 minutos. Un verdadero golazo de derecha a izquierda, a lo River, con manejo de pelota, pensando como lastimar al rival, siendo profundo y rompiendo con esa inútil idea de Olave de demorar el juego. Así se fue el primer tiempo, con el dueño de casa que tenía marcador a favor y posesión de pelota.
Luego del clásico descanso, volvieron para disputar el complemento. El mismo le perteneció al visitante por 20 minutos pero con el resultado puesto debemos decir que fue así porque River quiso. Por el sector izquierdo surgían avances interesantes del “Pirata” y los defensores riverplatenses la veían pasar. Solari estaba un tanto errático y Sánchez, en posición ofensiva, no bajaba lo suficiente. A los 12, Barovero dijo presente al taparle un tibio remate a César Pereyra, pero ya era algo raro ver a River desorientado. Y que decir 4 minutos más tarde cuando “Trapito” se lució ante el potente disparo de Emiliano Rigoni sacándosela del ángulo superior derecho.
Pero River es River y por algo es el puntero e invicto. Luego de ese protagonismo que le cedió a Belgrano, se despertó y se enojó. A los 27, el correcaminos Sánchez llegó hasta el fondo y le sirvió un centro perfecto a Gutiérrez. “Teo” le rompió el arco a Olave con una especie de volea y empezó el toqueTEO. Los de Núñez se floreaban con toques de primera, lujos, asistencias y más. Ingresaban Sebastián Driussi y Lucas Boyé para cambiar el ataque y el primero de ellos tuvo una gran participación en el tercer gol. Seba tenía la pelota y se la dejó a Sánchez que en posición de peligro la llevo casi hasta el final y descargó el pase atrás para la llegada de quien sino, de Gutiérrez. El colombiano la acarició con el pie derecho a los 42 y se fue a festejar con un grupo de compatriotas que dijeron presente en la Platea San Martín Baja. La gran figura de River suma 10 goles en el torneo y cada día enamora más al hincha. Ganó el líder, por las dudas, Olave.
Magnífica, estupenda y fabulosa jornada para todas las mamás del “Millo”. El equipo dio otra gran muestra de fútbol y se afianza cada día más para lograr el bicampeonato. No hay con que darle a este equipo comandado por Gallardo. El “Muñeco” sigue siendo clave en River como lo era cuando jugaba, aporta experiencia, estilo y paladar ganador. La alegría se expande desde Núñez hacia cada rincón donde haya un hincha del Más Grande, porque alguna vez se dijo que “En el ´Monumental´ solamente gana River” y muchos saben que si ese día no llovía, con cancha seca otra hubiese sido la historia.
Alexis Emmanuel Fuma
@alesn08
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