lunes, 22 de septiembre de 2014

¡ESTÁN ENDIABLADOS!



Que inventen palabras, que surjan vocablos, traigan frases, pongan su sello, dejen su huella. ¡Que viva la patria! Que explote todo. Fútbol champagne, señores. ¡Feliz día de la primavera y de los estudiantes! La fiesta se vivió en Núñez. Manos ROJAS de tanto aplaudir. Una PISCU de la gran historia para todo un pueblo vestido de rojo y blanco. ¿Acaso TEOlvidaste que las rayitas horizontales simbolizan una vieja historia que trajo grandes alegrías en la década de los años ´90? Cada vez deMORA menos en hacer el primero, y va por el segundo, y busca el tercero y quiere el cuarto. Te aniquila. Te apabulla. Te atormenta. Te mata. Así es el River velocidad 4G: gana, gusta, golea y te Gallardea.

“Mi equipo habla dentro de la cancha”, había dicho Marcelo Daniel Gallardo previo al encuentro frente a Independiente. Y vaya si habló ya que demostró otra vez lo que es jugar al fútbol, y dejó esa sensación de equipo invencible, de equipo arrollador que no encuentra rival, que no sabe lo que es perder y que si van 45´ del segundo tiempo, presiona como si fueran 2´ del primero. Sencillamente fabuloso, estupendo, sensacional e impresionante. El recital de la primavera se dio en Av. Figueroa Alcorta 7597 de la ciudad de Buenos Aires. Endiablados.

A los dos segundos de comenzado el partido robaba la primera pelota ya que el saque le había correspondido a Independiente. Electrizante fue el inicio de un cotejo para el recuerdo, para archivar en la mente de los clásicos de fútbol champagne. River salió dispuesto a dejarle un infierno al “Rojo” de Avellaneda que no veía la hora de que termine el partido a poco de haber arrancado. 3 minutos de juego y humildemente tengo que decir que para éste escritor de notas de opinión fue centro. Lo cierto es que Leonardo Pisculichi se paró frente a la pelota y el tiro libre desde el sector izquierdo se le metió a media altura casi por lo bajo al arquero Diego Rodríguez. Comenzaba el baile. Pero enfrente estaba uno de los 5 grandes del fútbol argentino y a los 8 minutos Daniel Montenegro hacía esforzar a Marcelo Barovero con un difícil remate desde afuera del área.

El equipo que conduce Jorge Almirón intentaba lastimar a éste River desde la conducción del “Rolfi” y la de Matías Pisano pero ni Claudio Riaño ni Federico Mancuello que lo tuvo con un cabezazo, podían con el “Millonario”. Y llegó el segundo. El córner enviado por “Piscu” llegó hasta el corazón del área y luego de un mal despeje defensivo, el balón quedó en la medialuna en poder de Ariel Rojas. El zurdo la clavó en el ángulo superior izquierdo del “Ruso” Rodríguez con un remate sutil que hizo estéril el esfuerzo del número 1. Todo sucedió a los 37 minutos y era completamente justo ya que el rival se veía atormentado por el dueño de casa. El dato negro de la noche lo protagonizaba Matías CRACKnevitter. El “Colo”, en una falta, sufrió una fuerte lesión y tuvo que ser reemplazado por Leonardo Ponzio. Y así se bajaba el telón del primer acto en el “Colón” llamado Antonio Vespucio Liberti.

Antes de comenzar a desarrollar las acciones del complemento hay que resaltar el perfecto trabajo realizado por Carlos Sánchez y por Leonel Vangioni. Cada uno por su sector de juego, arrancaban aplausos por doquier. River se floreaba en el día de la primavera y más allá de unos momentos de intriga por el descuento de Mancuello a través de un cabezazo a los 12 minutos, nada hizo que los de Núñez le pasen factura al “Diablo”. En el mejor tramo del partido para los visitantes, el error en la salida de Cristian Tula posibilitó el tercero del local. Si bien la jugada comenzó con una mano quizás casual quizás intencional de Jonathan Maidana, el corto pase de Tula hacia su compañero Rodríguez generó que Teófilo Gutiérrez esté atento y robara esa pelota. El cafetero se aprovechó de tal situación y a los 20 minutos decretó lo que ya era goleada.

Pero éste River que comanda el “Muñeco” nunca se conforma y siempre quiere más. Y fue por más con el ingreso de Tomás Martínez que, fresco y rápido, se la dejó servida a Rodrigo Mora. El uruguayo controló el pase del juvenil y definió de manera exquisita, maravillosa y sensacional por encima del guardameta “Rojo” cuando ya se jugaban 32. PRI-MA-VE-RA en River, recital de fútbol ante un equipo que venía con una cierta brújula y que al pisar el césped del “Monumental” la perdió por completo. Cumplidos los 45 minutos, Pablo Lunati de aceptable arbitraje decretó el final y el 4 a 1 marcó las diferencias entre un conjunto y el otro. Un consejo: si te compras un teléfono celular, pedí que tenga 4G. Ganó River, goleó, gustó y Gallardeó.

Continúa por la senda de los triunfos y hoy le sumó el juego que tuvo en varios partidos y que no se había plasmado tanto en la prueba semanal que había tenido frente a Godoy Cruz por la Copa Sudamericana. Pero hoy demostró otra vez porque quiere hacer historia. Como aquel River del ´96 y del ´97 que jugaba con una camiseta que tenía rayitas horizontales. Quiere ganar todo. Va por todo y va bien. Parece invencible, derrota rivales como quiere y cuando quiere y, aunque los protagonistas lo nieguen, interiormente cada uno debe soñar con que llegue el 5 de octubre y pase lo mismo que sucedió hoy y, si me permite, por partida doble.

Foto: Olé

Alexis Emmanuel Fuma
@alesn08

0 comentarios:

Publicar un comentario