domingo, 10 de agosto de 2014

UN EMPATE DESLUCIDO


River Plate a  Gimnasia Esgrima La Plata empataron 1 a 1 por la primera fecha del Torneo de Transición, esta noche en el estadio Único de La Plata.

Inconexo, incomodo y sin sociedades. En esas tres cualidades se resume el primer tiempo del equipo de Gallardo. Por el contrario, los dirigidos por Pedro Troglio, comenzaron el encuentro con mucha concentración, presión e intensidad. Sin embargo, cuando el reloj se acercaba al final de la primera mitad, muy levemente, los roles comenzaron a intercambiarse. Los primeros minutos, mostraron la peor versión de River. Con problemas para dominar el balón y sostener intensidad en el centro campo, todas las líneas se vieron envueltas en desordenadas. Ponzio, tuvo que cometer varias faltas por la falta de concentración propia y de sus pares. Es así que, las emociones, vinieron por el lado de “Los Platenses”. Aunque sin tener mucha decisión, Gimnasia, pudo haberse adjudicado la apertura del marcador pero la figura de Marcelo Barovero se encargó de negarles los festejos.  

A los 27 minutos, Gimnasia Esgrima, pasaba por su mejor momento y asediaba el arco “Millonario”. Tras un remate de Litch y un desvío impresionante de “Trapito”, la redonda dio en el palo. De esa misma jugada, la obtención de un córner volvió a poner a prueba los reflejos de Barovero que tapó un cabezazo increíble del jugador Veguetti. River la pasaba mal y los dolores, por los esfuerzos del arquero, dejaban una mala noticia: Trapito debía ser remplazado por dolores musculares y así, a los 32 minutos, Chiarini apresuraba su debut.  

La respuesta riverplatense llegó a los 32 minutos, con un peligroso remate del juvenil Lucas Boye luego de una buena apilada de Sánchez.  

Ya sobre el final del primer tiempo y debido a la lesión del jugador Meza, el “Millonario” pudo adelantarse en el campo de juego y preocupar, un poco más, a los defensores rivales. A pesar de esto, River siguió sufriendo la presencia de un organizador o “alguien que se haga cargo”. Los jóvenes delanteros, siempre se encontraron muy aislados, aunque por momentos pudieron concretar algunas triangulaciones interesantes, sobre todo por la banda de Vangioni. A estas alturas, Gimnasia ya se acomodaba para salir de contra y “el Millo”, intentaba aprovechar algunas superioridades numéricas  tras recuperar el balón rápidamente.

Ya, en la segunda mitad, la intensidad del encuentro fue mucho menor que al inicio del partido. Los primeros minutos se encontraron con dos equipos tan pensantes como imprecisos.  Pases largos y mucha pelea en todo el campo de juego marcaban una tónica difícil de cambiar. A los 15 minutos, Gallardo decidió enviar al campo de juego Teo Gutiérrez por el debutante Boyé (tuvo un interesante cabezazo en el área rival, que se fue por arriba del larguero, a los 11’).  

Ya a los 20 minutos, el juego riverplatense se vio con más aplomo y propuestas gracias al retroceso de Gimnasia y que Pisculichi se posicionó de “enganche” y el medio campo decidió recuperar más arriba. Esto permitió que, Ferreira y Sánchez, queden más sueltos y con libertad de juego. Entre ellos dos, estuvieron las dos aproximaciones más interesantes hasta ese momento: Un slalom de Sánchez, falta y tiro libre al borde del área (mal ejecutado por el Malevo) y un disparo de larga distancia de Ferreira bien controlado por Monetti.  

En este tramo del encuentro, River se apoderaba, levemente, del dominio del juego pero una falla en el grupo electrógeno del estadio causó un apagón en varios de los reflectores y a los 24 minutos, Nestor Pittana paró el partido y la mejoría “Millonaria”. Tras 7 minutos de espera, las luces del estadio volvieron y con ellas, el  partido y el uruguayo Mora que ingresó por el juvenil Driussi. A pesar de estar mejor posicionado, el conjunto de Marcelo Gallardo no logró preocupar demasiado a Monetti y el encuentro se transformó en un recital de imprecisiones, por ambos equipos, en la mitad de cancha pero con mayor posesión de balón por parte de River Plate y un poco más de impronta. Esto marcaba que River se aproximaba más al arco de Gimnasia y, tras un tiro libre, perfectamente ejecutado por Pisculichi, Teo metió la cabeza y marcó el primer Gol del encuentro a los 45 minutos y, un minuto después, Mora casi convierte el segundo luego de una exquisita vaselina que pegó en el palo. El golpe anímico por el tanto de Teo,  calmó los nervios pero a dos minutos del final, Gimnasia llegó al empate gracias a una mala marca de River en un córner que empujó Vegetti bajo el arco y, como si fuera poco, en la última jugada, casi lo pierde otra vez en los pies del mismo jugador que definió mal solo, nuevamente frente al arco.

Con este resultado, River Plate suma su primer  punto en el torneo y se ubica en el segundo escalafón de la tabla de posiciones.

La próxima fecha River se enfrentará, de local, con Rosario Central, el próximo domingo a las 18:30 horas.

Esteban D’Agostino
@daguitos

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